Hablemos de frenos
Los frenos son uno de los componentes indispensables de una bicicleta tanto convencional como eléctrica, pues pueden mejorar muchísimo la experiencia en tu bicicleta eléctrica. Existen 2 grandes tipos de frenos: mecánicos o hidráulicos, cuya principal diferencia es el funcionamiento.
Mientras que los mecánicos funcionan a través de un “chicote” o cable, que se jala desde la palanca de tus frenos, los hidráulicos funcionan gracias al cambio de presión del aceite que llevan dentro. A continuación te contamos más sobre ellos, así como sus ventajas y desventajas.
Frenos mecánicos
Los frenos mecánicos constan de un cable, un disco mecánico y una palanca de freno que al oprimirse, se unen para detener el disco, son los frenos más básicos conocidos por su fácil y rápido mantenimiento. Tienen un poder importante a la hora de frenar, pues bloquean la rueda con facilidad, aunque depende de la fuerza que apliquemos con las manos.
Ventajas:
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Puedes darles mantenimiento con facilidad.
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Fácil encontrar repuestos con facilidad.
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Son más económicos.
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Prácticos y mantenimiento sencillo.
Desventajas:
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Menor control y potencia de frenado.
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Se dañan más fácilmente con el polvo o la suciedad.
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Necesitan un mantenimiento constante.
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Desgastan más rápidamente las balatas.
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Requieren bastante esfuerzo para frenar y pueden llegar a ser agotadores para las manos
¿Sabías que en su momento fueron el único tipo de frenos en el mundo de las bicicletas eléctricas?
Frenos hidráulicos
Consisten en un sistema sellado lleno de líquido, que reemplaza los cables de acero para evitar que el ciclista pierda el control al frenar, brindan un mejor rendimiento, potencia, control y velocidad en el frenado gracias a su mecanismo mejorado, son mucho más eficientes y se les aplica menos presión en la palanca cuando vas a frenar ya que contienen un líquido especial que los activa.
Son más confiables debido a su sensibilidad al frenar y con un mínimo desgaste, ya que llevan un control total sobre la frenada y solo se bloquean si tú lo haces. Por otro lado, estos beneficios tienen un precio más alto que los frenos mecánicos, debido a la calidad y la mejora que estos tienen.
Ventajas:
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Funcionan en cualquier clima.
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Son más eficientes al frenar.
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Necesitan poco mantenimiento.
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Mayor potencia y estabilidad.
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Mayor suavidad y rendimiento.
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Sistema protegido contra daños.
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No requieren ningún esfuerzo para frenar.
Desventajas:
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Los repuestos son costosos debido a la alta gama.
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Repararlos requiere de herramientas especializadas, aunque cada vez más talleres tienen la capacidad de atender frenos hidráulicos.
Con las altas potencias de nuestros motores, y nuestro cuidado constante por la calidad y gama de nuestros componentes, poco a poco hemos actualizado nuestros modelos para utilizar frenos hidráulicos de manera exclusiva, pero manteniendo una gama de precios impresionante.
Además, los frenos de las bicicletas eléctricas Pulse tienen otro factor único, que añade calidad y seguridad a los usuarios: el sensor KillSwitch, que garantiza que al accionar los frenos se elimine cualquier corriente eléctrica hacia el motor.
Ahora que ya conoces un poco más sobre los frenos ¿Cuáles prefieres para tu bicicleta eléctrica?